La corrupción sigue siendo el flagelo del mundo… y de Latinoamérica en especial
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El Informe 2020 de Transparencia Internacional (TI), que muestra el Índice de Percepción de la Corrupción (IPC), mismo que fue dado a conocer el 28 de enero, deja en claro que los gobiernos son cada día más corruptos y que la región latinoamericana y caribeña siguen de capa caída con respecto a mejorar frente a este flagelo que le corroe las entrañas.
Por veinticinco años TI ha calificado del 0 al 100 a cerca de 180 países en los cinco continentes basándose en la opinión que tienen organismos e instituciones no gubernamentales sobre la gestión del sector público de su país. En 2020, el Índice midió la corrupción en lo que se refiere a la gestión pública de la pandemia de la Covid-19.
Los mejores, los países nórdicos
Como ha sucedido desde 2012, los países nórdicos ocupan los primeros sitios. Sin embargo –gracias a la gestión de la pandemia de la primera ministra Jacinda Ardern—en esta ocasión a Dinamarca se la ha unido Nueva Zelanda con 88/100 puntos en el IPC, por arriba de Finlandia, Singapur Suiza y Suecia que ocupan el tercer lugar mundial con 85/100 puntos.
En la vía contraria, los peores en el IPC a nivel mundial vuelven a ser los países africanos y uno de Medio Oriente. En efecto, el último lugar lo comparten Somalia y Sudán del Sur con 12/100 puntos, seguidos, muy de cerca, por Siria, que apenas llega a 14/100 en su IPC.
Medido como un todo, el mundo reprueba (suspende, como se dice en España) el IPC, con una media de 43/100 puntos, lo cual refuerza las palabras del Papa Francisco en el sentido de que es imposible pensar en regresar a “la normalidad”después de la pandemia.
Radiografía de una región
En América Latina un país sudamericano, otro caribeño y uno centroamericano son los peor situados en el IPC de 2020. Casi no es sorpresa que Venezuela ocupe el último lugar en la región, con 15/100 puntos, seguido de Haití con 18/100 puntos y de Nicaragua, en donde el IPC alcanza 23/100.
Por lo que respecta a quienes se encuentran en la cima de los países latinoamericanos, el primer sitio se lo lleva Uruguay con 71/100 puntos, mientras que el segundo sitio corresponde a Chile con 67/100 puntos del IPC. México mejoró dos puntos su calificación respecto a 2019, pasando de 29 a 31/100 puntos, pero sigue siendo el que posee el peor IPC entre los 37 países miembros de la OCDE.
Por lo demás, el caso más grave de IPC es Venezuela, que es el quinto país con el sistema más corrupto del mundo y su IPC no deja de empeorar desde 2013. En 2020, Venezuela ocupa, junto con Yemen, el lugar 176 de los 179 países que formaron parte del escrutinio de TI, solo por arriba de Sudán, Guinea Ecuatorial y Libia.
Aunque también hay focos rojos para Centroamérica: Nicaragua ha empeorado en siete puntos desde 2012, pero no lejos de ella se encuentran Honduras (24/100 puntos de IPC) y Guatemala (25/100), país este último que ha caído ocho puntos de IPC desde 2012.
El organismo no gubernamental creado en Alemania en 1995 centró su informe de 2020 en el impacto que la corrupción ha tenido en la gestión de la pandemia de coronavirus. Los países con niveles más altos de corrupción dedican menos recursos a la salud, lo que afecta los servicios públicos esenciales y, por lo tanto, provoca mayor mortalidad por la Covid-19.
Buenos y malos ejemplos
El mal ejemplo latinoamericano es Venezuela, país que perdió por la corrupción “al menos 5.000 millones de dólares en las últimas dos décadas, lo que afecta directamente a la salud de los venezolanos”, dijo a la agencia de noticias AFP Luciana Torchiaro, responsable regional de TI para América Latina.
Por el lado positivo, TI destacó el trabajo que ha hecho Uruguay que según el informe sobre IPC tiene la inversión en salud más alta de la región latinoamericana, lo que le permite tener “un buen sistema de seguimiento epidemiológico que ha sido de gran ayuda a la hora de afrontar el COVID-19”.
También el Informe 2020 resalta el trabajo del Perú (38/100) “donde la aprobación de dos leyes para impedir que los condenados por corrupción accedan a cargos públicos y para mejorar la transparencia en las finanzas públicas sugieren una mejora de la lucha contra este flagelo”.
Guyana (41/100) y Ecuador (39/100) son los países latinoamericanos que más han mejorado su nota desde 2012, 13 y siete puntos de su IPC, respectivamente.
El IPC anual de Transparencia Internacional, es el resultado de conjuntar datos de trece fuentes de información de trece instituciones distintas y está basado en la opinión de analistas, personas expertas y mujeres y hombres de negocios de diversos países sobre la situación que guarda la corrupción en cada una de las naciones evaluadas.
Fuente : https://es.aleteia.org/